Cuatrociénegas, Coahuila, es un oasis en el desierto Chihuahuense, con un conjunto de cientos de humedales, pozas, lagunas y ríos que representan un ecosistema único del mundo, con comunidades relictas muy antiguas, y uno de los mas altos niveles de endemismo de Norte América. Las pozas de Cuatrociénegas representan una especies de Islas Galápagos invertidas (cuerpos de agua rodeados de desierto) y así nos permiten estudiar activamente procesos ecológicos y evolutivos locales. En general, las aguas de Cuatrociénegas tiene niveles muy bajos de nutrientes, en especial de fósforo, por lo que sus comunidades de bacterianas, predominantemente estromatolitos y tapetes microbiano, han logrado adaptarse reciclando los pocos nutrientes y formando la base de la cadena alimenticia. Recientemente se han comenzado a utilizar enfoques de Ecología Molecular en sus estudio, incluyendo enfoques genómicos (e.g., la secuenciación de varios genomas bacterianos) y metagenómicos. El aislamiento, antigüedad y características particulares del sitio lo hacen un lugar privilegiado para entender, desde un punto de vista multidisciplinario, los mecanismos de adaptación y especiación. Es por esto que Cuatrociénegas ha atraído la atención de numerosos investigadores nacionales y extranjeros los cuales han colaborado compartiendo información muestras e ideas generando ciencia de alto nivel. Paradójicamente, estas Galápagos del desierto se encuentran bajo una increíble presión antropogénica, en particular por el reciente desarrollo de la agricultura para producir alfalfa en este valle y en valles vecinos por lo que se ha realizado una gran labor de concientización y conservación a diferentes niveles. |